Son pocas las personas que suben al Putucusi, porque no saben que se puede subir y otro porque no conocen la entrada de acceso (y si supieran que es muy agotador subirlo sería otro motivo).
El Cerro Putucusi esta enclavado en el medio de los picos Machupicchu y Huaynapicchu que sirve como un eje visual complementando un primer circulo de cerros.
Al ascender en la ruta nos encontramos con variadas formas de camino, entre ellas: escaleras, pequeños puentes en medio de la vegetación, pero lo que más impacta es aquella escalera de casi 5 pisos. Me dije: Jorge que haces aquí!. Un cable y sus interminables escalones de madera me impactaron. Con una variación de casi 80º grados de inclinación a cualquiera se le cruza la idea de la caída y el temor ronda la mente. Me convertí en oso perezoso.
Estaba frente a esta inmensa y única escalera más grande que pude subir. Tomando los cuidados subí y lo hice en tres tiempos. Es agotador y cuando estuve arriba, mire abajo y dije:...¿como será la bajada? mejor no pienso en eso; mejor lo dejo para el regreso.
Subir, caminar, sudar, subir escalones, descansar, tomar agua, respirar son la rutina pero cuando uno alcanza el 70% de la altura...ahí es donde uno tiene la recompensa. El paisaje es H-E-R-M-O-S-O y Ú-N-I-C-O, no se compara con la vista desde el Intipunku, ni con la vista desde el Huaynapicchu. Es cierto, desde lo alto de estos diferentes picos la vista panorámica jamas es igual y cada uno de ellos tiene su particularidad. Pero en mi apreciación de hormiga a mi me impacto más esta tremenda subida y descansar allí arriba es una paz recomfortadora. Así que cuando llegues a Machupicchu trata de subir el Putucusi, y puedas contar tu experiencia con tu familia.
Disfruten de las fotos...que yo disfrute de estar en el hermoso pico Putucusi.
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